Con el último resultado de las elecciones complementarias en Chile, sin duda se abre la posibilidad de pensar en un reacomodo en el mapa geopolítico de Suramerica; donde las preocupaciones de quienes se reúnen en torno a la concertación; que además esta estrechándose en el círculo, son evidentes; más allá de un saludo diplomático muy bien mostrado; sin duda hay una serie de interrogantes que ahora deben ser parte de la agenda del balance, uno que trasciende el solo evento eleccionario. y que sin duda ha sacudido la emoción de los chilenos, tanto los que lo apoyan, como aquellos que lo crítican.
Tras 20 años en el gobierno, con una herencia de acaudalado apoyo popular dejado por Pinochet, y con los importantes avances que ha tenido el país sureño en 2 décadas, cabe preguntarse: ¿Por qué se corta la continuidad y que escenario es el que se ha generado o mejor aún, esta generándose?
En el año 2009, la disidencia del joven Marco Énriquez Ominami, daba un fuerte señal de alerta, que no se asumió con la seriedad y la responsabilidad del caso; quizás ahí se pueda encontrar alguna clave de lo que esta pasando y pasará en Chile. Queda esperar, la ruta que ahora le toca trazar al millonario Piñera. Una ruta que no solo seguirá Chile.
El debate esta abierto...cual es ese rumbo?
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